P: ¿Cuál fue el momento exacto en el que os disteis cuenta de que Peepshow no era solo un proyecto, sino vuestro proyecto? En mi caso Peepshow es un canal de expresión indispensable, una necesidad vital, algo que me di cuenta desde la publicación del primer álbum. A Germán, prácticamente un miembro fundador de la banda, le pasa algo parecido. Estamos bastante conectados con esa necesidad de expresión tan necesaria en nuestra vida que cuando hemos tenido que bajar la actividad del grupo por circunstancias externas, entramos en una especie de espiral de ansiedad y locura. Ana es una recién llegada y está demostrando un esfuerzo titánico por adaptarse a un proyecto que tiene un nivel de exigencia alto. Ella nunca había hecho coros en directo tocando el bajo. P: Si tuvierais que resumir la esencia de Peepshow en tres palabras que no tengan nada que ver con música, ¿cuáles serían y por qué? Ensoñación. Para nosotros poder hacer lo que hacemos es un sueño. Intensidad. Que las ideas que se trasmiten sean intensas y esclarecedoras. Compromiso. Estamos comprometidos con una causa ambigua pero poderosa, que es estar en una banda. P: ¿Qué aporta cada miembro que hace que la banda funcione cómo funciona? En PEEPSHOW hay una fuerte responsabilidad artística, es decir, somos conscientes de que hacer las cosas bien no es tan fácil ni rápido, pero todos trabajamos intensamente para alcanzar el nivel que entre todos nos exigimos. Individualmente el roll de cade miembro es importante. Germán se encarga más de los aspectos técnicos del directo. Que todo funcione correctamente. Ana aporta una visión más con sentido común y ayuda en las gestiones más administrativas. Es como un pegamento entre la calle y la banda. Y yo pues soy un poco el director de la historia, pero principalmente estoy generando ideas tanto en el campo de la comunicación como en otros aspectos.

elabruma regresa con fuerza y carácter para presentar “Aprendiz de Villano” , su nuevo videoclip, una pieza audiovisual que amplifica la crudeza emocional y el pulso desafiante de una de sus canciones más directas. El tema, que ya destaca en su repertorio por su lenguaje afilado y su atmósfera inquietante, encuentra ahora una nueva dimensión en un vídeo que convierte la letra en una historia de tensiones, identidades fracturadas y verdades incómodas. ¨Aprendiz de Villano¨ es un viaje al filo. La canción confronta aquello que preferimos no mirar: las costuras abiertas , los huesos mal curados , las máscaras que ya no aguantan . Entre imágenes poderosas y metáforas punzantes, Delabruma retrata a un personaje que presume de astucia pero cae en su propia cobardía, incapaz de ganar o perder sin perderse a sí mismo. Un retrato sin maquillaje, narrado desde la lucidez y la rabia contenida. El videoclip acompaña este relato con una puesta en escena cargada de simbolismo : sombras que revelan más que ocultan, luces que exponen las grietas y una estética que convierte al “aprendiz de villano” en un espejo roto donde cualquiera podría reconocerse. La sensación es la de asistir a un duelo silencioso, donde lo personal estalla sin artificios.